La Facultad de Bellas Artes de la Universidad Miguel Hernández está situada en la ciudad valenciana de Altea. Este centro ha sido diseñado para afrontar los retos de la formación artística en un contexto contemporáneo de permanente reformulación de las prácticas culturales.
Este centro alteano necesitaba de la adecuación y del acondicionamiento acústico de una de sus áreas que se iba a convertir en una sala de grabación. Se trataba de dos salas de grabación comunicadas por la sala de control. Este tipo de recinto necesita de las mejores condiciones a nivel acústico para que en ellas se puedan desempeñar tareas tan especializadas.
Para la ejecución de las tareas para el acondicionamiento de la mencionada sala, nuestro equipo instaló paneles absorbentes tanto en las paredes como en el techo, adecuando el recinto de grabación como la sala de control de la misma. En una de las salas, la habilitada para grabación de instrumentos, se instalaron dos trampas de graves para minimizar los modos y la reverberación a baja frecuencia, como la que puede producir una batería.
El resultado final fue una instalación que permitió controlar la reverberación del recinto, haciéndola ideal para la grabación de voces e instrumentos musicales.
También se instalaron dos patch panels en las salas de grabación con todo el cableado necesario para comunicar los micrófonos y altavoces entre las salas de grabación y la sala de control.
El resultado final fue una instalación que permitió controlar la reverberación del recinto, haciéndola ideal para la grabación de voces e instrumentos musicales.