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Aunque el estudio no se pudo realizar sobre una base física, ya que la parroquia se encontraba en fase de construcción, no fue un obstáculo puesto que se realizaron varias simulaciones para analizar el comportamiento acústico del lugar partiendo de las características de los materiales constructivos proyectados. Una vez precisado el nivel sonoro adecuado, se realizaron varias simulaciones con una o varias columnas Intellivox DC-180.
Manteniendo la mayor integración estética se determinó que la mejor opción era utilizar dos columnas DC-180, con control variable de la dirección del sonido, en los frontales laterales de la Iglesia. Ya que garantizaban unos niveles homogéneos de inteligibilidad de 0,55 de media.
Se instalaron dos vídeo-proyectores proyectando sobre los laterales blancos del altar. Para mejorar la comunicación entre las distintas partes de la parroquia se instaló, en los salones parroquiales, un altavoz por aula centralizados por un conmutador en la sacristía. Un pupitre microfónico con función de tonos de aviso permitía emitir mensajes a las diferentes aulas de forma independiente. Igualmente se instaló una mesa de mezclas digital con efectos contando con una gran potencia de procesado de audio. Ya que al no diponer de un técnico de sonido esta mesa digital nos permite preconfigurar varios presets adaptados a cada situación, permitiendo un funcionamiento sencillo de la mesa de mezclas.
